(A mí primo Blas Vera Vivancos y demás familia mazarronera)
Tintada veta en roso de la almagra
(poblando en sangre la mina la tierra),
a bella estampa la vista se aferra.
Tela tan oxidada en nada es magra.
Y con esa calima tan guerrera,
seco paisaje con rostro tan agro
a su sudor al agua le consagro.
En el campo lagrima la palera.
El Cabezo Negro y el espartizal
en memoria guardaron mi niñez.
Allende las Moreras el Cantar.
Mira al cielo el erguido cañizal
rozando en Las Pedreras su esbeltez.
Las Gredas de Bolnuevo son altar.