27 febrero 2015

DETRÁS







Hay detrás 
del tragaluz
un mundo 
que se escapa
cada día, ¡ay!, 
con su candela
y cada noche 
con su umbría.

Hay detrás de tu mirada,
un frontispicio que emana 
amargura, esa piedra 
sin tallar en bruto
que solo respira 
lágrimas horadadas.

Muestran tus manos
al mundo que te circunda
un pliego de tinta 
mojada con letras 
borradas, llenando 
un deseo huero 
de candiles sin llama.

Llamas en la noche,
envuelta entre abandonadas 
sábanas al ángel,
que te aguarda lejos,

llenas en la negra 
confusión
un grito seco, 
casi mudo,
que se esconde 
con amargura
detrás de la sonrisa
que dibujas 
como un mueca.

Rompes los cristales
de cada ventana
que tras un vidrio adverso
ciega cada juventud,
esa que ansías,
tragando el tósigo
al que atónita
te has sentenciado
por no saber 
subir a lo alto 
de ese cielo
que se difumina
en borrones grises.