02 agosto 2014

EN EL PÓRTICO



photo credit: §Claudio§ via photopin cc


Asiendo el cáliz 
en el pórtico,
el de la gran 
efeméride,
mientras ella espera, 
impertérrita,
a que se abran las llaves 
y las puertas,
que encienden las luces 
y calientan
las bombillas, 
como un preludio
del día que aún no despierta
las conciencias 
y los sueños.

Haciéndose rogar él
con la carga de la ambrosía,
inconmovible ella
como un busto,
deseando que le perfile, 
puliendo sus curvas
como un frío mármol de lápida,
escribiendo en letras negras
las memorias, 
los ancestros,
que descansan 
en la soledad
del camposanto 
recibiendo al dios gusano.

Larvas en los pies 
que hacen cosquillas,
hasta que él deja 
el triunfo de su victoria
presto a pasar a la gran sala
tras la joven 
con erizadas montañas,
avecinando un monte que refugie 
el caliente Sol 
en sus húmedas entrañas.

Atrás el portal 
que se cierra.

Tres gatos me miran,
mientras mis pasos
marcan las huellas
en el camino, y
los amantes se despiden
después del mal trago
que las prisas, con sus ansias,
desbordaron mil mares
en lo recóndito 
de sus regazos.