Tu
fiel retrato
se
ha dibujado
en
ese justo
fugaz
momento,
iba
ordenando
cada
pieza gris
y
has congregado
mil
arco iris.
Sucinto
Adviento,
alegre
hallazgo
que
se me ha ido
igual
que pasa
un
suspiro lento.
Tenía
tanta
sed
de embeber,
de
llenar asaz
la
garganta de
ti,
sin mi, en mi
y
se abrió la mar
cayendo
del cielo
frágil
mi propio
firmamento.
Arco
de color
fútil,
nimia fe
en
el destino.
Pintando
rasgos
de
ti entre líneas
en
nuestro espejo
veo
tus ojos
que
no reparan
en
nada más,
en
tu cresa
felicidad,
en tu
disfraz
añil
turquesa
cielo.
Tintando
trazos
en
mi sendero
llevo
oculto de
ti,
sin mi, en mi,
mi
acerba fe
en
mil pedazos.