Alauda

04 diciembre 2025

Indigente




Es largo el camino sin pan que llevarse a la boca,

es un día largo,

es un triste día sin familia 

ni amigos a quienes pedir 

las sobras del domingo.


Es duro pedir a los demás

avergonzado por la culpa

de ser pobre, de llevar 

desgastados y rotos los zapatos,

de vestir con la ropa de los otros

y recurrir al comedor social

a tomar una sopa y un pescado.


Es duro dormir en la calle tumbado en un banco,

dormir en el metro soñando que no me despierten,

dormir donde mean los perros,

dormir entre toses y vómitos.


Es duro fumar las colillas

de gente que tira el tabaco encendido,

que escupen el suelo que piso,

que ríen sus gracias,

se meten conmigo,

se van y me siento abatido.


Es duro estar sucio 

y oler a demonios,

es duro lavarme en los charcos

sin agua corriente.


Es duro ver felices a los otros

y verme yo feliz comiendo sus mendrugos.


Es duro celebrar cada domingo

mirando la cruz

que pende de un hilo,

de un hilo finísimo y duro

que aguanta a mi cuerpo

que cuelga del alma

que se ase a la vida,

la vida en la nada

y nunca se ahoga

mirando a la cruz

del Cristo que vence a la muerte.




03 diciembre 2025

Esperando la barca




Más de medio siglo me antecede

en la antesala del invierno

y el frío en mi florece

marchitándose el deseo.


Caminante sin camino,

senderista sin sendero,

con el perceptivo libro

leo estático mi tiempo.


Ya no hay mal que adolece,

ya no hay bien que me contente,

levantando yo la frente

me desnudo de repente.


Me amanta el dulce sueño,

sueño justo y duradero

rechinándose los dientes

estoy frío como el hielo

y el calor ya no revierte

esta helor y desespero.


En esta primavera del invierno

me reúno con las piérides

y andamos por las fuentes

descalzándonos primero.


Tengo frío, casi viejo,

me preparo las sandalias

y el zurrón de viejo cuero

en estas horas tan canallas.




02 diciembre 2025

Rechazo

Safo, Faón y el Amor de Jacques-Louis David




Bella Safo, 

yo no soy Faón

con el remo en la barca 

llevando a la harapienta anciana

que un frasco de perfume regaló

por la moneda recibida

de un viaje que ella nunca le pagó.


No soy, 

bellísima Safo, el sin par Faón,

mas vos sí la más hermosa de las jóvenes doncellas

que se muere enternecida por amor,

amor que os querella

por no prestaros vuestro amado la debida atención.


No soy, hermosísima Safo, 

ese tal Faón

embellecido por un bálsamo,

por un perfume, por un aroma, que le convirtió

en hombre deseado,

siendo, sí, vos la musa del pintor,

del poeta, de los dioses por ser 

s bella que la Luna y que el Sol.


Olvídame Safo, yo no soy Faón.







01 diciembre 2025

Oleaje

Imagen de Kev en Pixabay




Me conmueve la música sonora de las olas

y el ritmo trepidante al olear 

dejando en la arena bella espuma

y el salitre que respira el ancho mar

que desborda en la playa el rebalaje

adornado en aroma a maresía.



30 noviembre 2025

Te evoco VI

Imagen tomada de Pixabay




Sentados en la barra de aquel bar

esculpiendo en el aire siluetas

que subían al cielo cenicientas

agarrados a la copa de coñac.


Aquel tiempo lo recuerdo con agrado

esperando encontrarnos y fumar

los cigarros con descaro

sonriendo hablando sin parar.


Te recuerdo con tus labios encarnados,

con aliento de la brisa de la mar,

recitando paladares encontrados,

esperando poesía declamar.


Yo te quise cada viernes,

cada sábado despertaba al esperar

que el domingo se alargara

la velada que ya nunca volverá.






29 noviembre 2025

Te evoco V

Imagen de Siegfried Poepperl en Pixabay




Te apoyaste en mi vientre

después de no vernos por un año

y sonaban los clarines con un eco

deshojando cada pétalo.


Los años pasaron, el viento y la lluvia,

el Sol del verano y la gélida nieve, 

y hablamos tendido en el metro sentados.


Evoco tu pelo encrespado

con luz que bajaba

lentísimamente del cielo

lucido en colores tu talle.




28 noviembre 2025

Te evoco IV

Imagen tomada de https://plantameloencasa.wordpress.com/




Te recuerdo paseando aquel otoño,

tendidos en la cama aquel verano

o haciendo los honores en invierno

en lo alto de la ínclita terraza.


Con tus azulados soles

te recuerdo la mirada en primavera

luciendo mil sonrisas esa víspera

abriendo muy simpática la puerta.


Te recuerdo cansada viniendo del trabajo

el último verano con lamidos a destajo.


Te recuerdo poderosa argumentando mis fracasos

y salía victorioso recosidos en abrazos.


Te recuerdo mientras duermo

despertando solitario

requiriendo en silencio lo presente,

impío yo encerrado en este claustro.





Indigente

Es largo el camino sin pan que llevarse a la boca, es un día largo, es un triste día sin familia  ni amigos a quienes pedir  las sobras del ...