Si
hubiera de definir el silencio
recurriría
a la alegoría de tu figura.
Si
hubiera de acotar las horas
lo
haría mudo para ser testimonio
de
la sonrisa que nunca me dedicas.
Si
hubiera de elegir
me
quedaría a orillas del mar
oliendo
olas cegado por lo imponderable.
Si
hubiera de volver del revés
el mundo haría un barco
de
papel donde arrojaría la indiferencia.
Si
hubiera de saltar desde lo alto
me
apartaría para volver a ser mecido entre las olas.
Si
hubiera un tiempo nuestro
sabría
que no desperté de un sueño roto.
Si
hubiera querido olvidar
pintaría
de noche las ventanas.
Si
hubiera de mirar atrás me negaría
y
seguiría dibujando huellas por la arena.
Si
hubiera de pintar tus labios
me
sumergiría en lo vasto de nombre.
Es curioso como esas alegorías nos llevan a plasmar preguntas en deseos. Mucha belleza en esos si hubiera, querido.
ResponderEliminarBesos, Joan.
Preguntas y deseas que encierran la respuesta, si me permites la licencia.
ResponderEliminarBesos Yayone