photo credit: epitafio de un valiente via photopin (license)
Se esconde la palabra en un silencio
que ambos pensamos sea procedente.
Miro el horizonte,
se posa el limbo en mis ojos,
cela mi alma de sus nubes.
Se han roto las señales que te verso
como un quebrado cántaro de miel.
Los guijarros esculpen mi ventura.
Tan obvio se volvió tu disimulo,
muda tornó la hambrienta poesía.
Con la punta del dedo tu huella
escribe cada letra en mi epitafio.
escribe cada letra en mi epitafio.
nunca dejaremos que la poesía se vuelva muda
ResponderEliminarMudo he estado muchos años y siento no haber contestado. Ahora que he vuelto a escribir y a repasar y corregir, me estoy poniendo al día y contestando, tarde ya a destiempo, por lo que te/os pido mil perdones.
EliminarPrecioso poema.
ResponderEliminarMuchas gracias y de nuevo mil perdones por la demora en contestar.
EliminarMaravilloso poema. Un saludo
ResponderEliminarMuchas gracias por tu comentario y mil perdones por esta eterna demora.
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