Triste ausencia revelas
verdad, certeza y beldad,
desvelas en fino tapiz
la aluzada inocencia,
gracia del alma nacida,
alma viviente
de pintados colores...
Triste ausencia revelas
verdad, certeza y beldad,
desvelas en fino tapiz
la aluzada inocencia,
gracia del alma nacida,
alma viviente
de pintados colores...
María Lorente Vivancos. D.E.P.
Se nos fue María al Cielo,
Se nos fue "la Mariquita",
Va a regalar con su verbo
Recital de Poesía.
Y la campana de auroros
Alumbra con sus tañidos,
Con sus repiques sonoros
Senda de la Mejor Vida.
Dados por alumbre y plata,
De bellos ocres mineros
Pinta María la Esfera;
De Lorca, clama sus versos.
Allí, mis primos, sus hijos,
Con tantos que nos legaron
Nuestros caminos prolijos
Que ha trazado el Universo.
Antes del Sol cae lluvia
Empapando las mejillas
Y el recuerdo: fina pluvia,
Se cuela en todas las almas.
Siendo niño, y no hace tanto,
Memoro Los Celaores
Con mi prima y con mis primos,
y María en sus labores.
Riendo siempre ella sin freno,
Sus abrazos tremolando,
Con esa mirada abierta
A cada alma escudriñando.
O con rasgo regio y duro
Curtido bajo Astro Sol
Con sus prisas y sus cosas;
Recuerdos de almendro en flor.
Ella recitará a Lorca
Con claro predicamento,
Volando allí entre las nubes,
A lo alto del Firmamento.
Imagen de wirestock en Freepik</a>
Soy un Sol extinto
sin lugar ni parte que fenece.
Mustio, ajado astro,
Sol muerto, óbice, traba,
restos de cenizas.
Exánime carbón tan derretido.
Soy un vil horizonte que se apaga
(no se acuesta la negra noche
sin estrellas ni destino).
Busco esconderme,
Rey etéreo, en el ático de dioses
protegido en asilo, postergado,
pintando los colores del tiempo los adioses
a los antiguos rayos donde cálidos
—vientre tan pretérito—
germinaba la semilla de la vida.
Se alarga la amarga negrura
elástica que nunca se encoge;
tensa cada hálito
en un ardiente fuego.
La amarga negrura se alarga
en humo vivo naciente, en vapor,
de las ascuas de un incendio.
Sin almíbar, sin la dulce ambrosía
que la Luna llena esconde en su guarida.
Despojado del verbo, de la amable mirada
que a otro astro nuevo dedica.
Luna llena de banquete y caricias ajenas.
No hay altar ni nicho,
no hay lápida ni mausoleo,
siquiera hay donde caerse muerto.
Solo albergo el triste consuelo
del fenecido. Ser presa del fuego
y arder en este infierno.
Fragmento de <<El nacimiento de Venus>>, de Sandro Botticelli
Lucíferos tus ojos, tu frente plata fina.
Es tu estampa tan cumplida.
Bruno y hermoso cabello el que te anida.
Es más precioso y súbito al brillar
que las constelaciones, tus pupilas.
Tu figura de ardor tan reluciente
el universo aluza de hermosura.
Tu mentón, sin par, lindo jaspe bien adornado.
Es bella sutileza tus cejas palatinas.
Con gracia tus pestañas abanican
dulce brisa.
Bonita venusina tu sonrisa.
Elegante y graciosa es tu mirada
solamente si tú me la dedicas.
Septiembre 2024
De azul se pinta el plomo que flota con las nubes,
en la boira se mecen y las olas dibujan
acabado rizado que se acerca a la orilla
de arena que se alivia la sed que nunca sacia.
La mañana despierta los dormidos espíritus,
se arremanga la noche que quedó en la almohada,
en la cama planchada deshaciéndose en mimos,
en deseo, en los sueños, en plisadas cubiertas.
Se levanta la brisa, llega siempre
zalamera rozando las mejillas
y arrebolan sonrisas sus lisonjas.
Dibujan los adioses dulcedumbre,
los arcos de los párpados se besan.
Marchitan las estrellas escondiéndose.
Septiembre 2024
Leones no hay en la Casa del Jacinto,
no bromean sus pomos con niños alocados
drogados en azúcar.
Solo
la arena,
rigor de cervezas.
Conversaciones espumadas
en carbónico gas
se desvientan
en un pis plas.
Buenos gestos,
amables sonrisas,
pegajosa humedad
a pie de playa,
con Ral al lado
con rúbrica de poetisa dedicado.
Sentado fumando el salitre arrullado
por las olas,
aguantando urbanitas
como yo.
Ellos asilvestrados
por tanto exceso de agua,
de mar,
de sol,
de luz,
de vacaciones
lejos de sus cuatro paredes
representan la escena familiar;
la pubescente lola
pone cara de aburrida;
parece comer limones,
tan rica es su abulía.
O comen la paella con gula a lo paleto,
sin orden, no son discretos,
solo falta que engullan
oronda paellera;
pareciera no coman nunca
arroz con leche en su vida.
Son neocons, fachas de chata chía.
A veces viene bien alejarse del barullo
enarbolando una fría
sin filtros,
bruta,
nada escrupulosa
rubia de botellín.
Prefiero la puericia empalagosa
azucarada con cola cao,
de coca cola,
con chuches de colores,
con margarina colorida
y cereales más almibarados
que manzanas bermellón de las Ferias;
así tanto gritan,
son tarzanes
sin palacazú,
sin pirulí,
sin rico parisien,
sin pipas
ni manises.
Gritos pegan
los fantasmas
que aparecen
de improviso,
reyes del mambo,
parece que vendan Pisos
o Castillos en el Aire,
siempre van
de dos en dos,
parecen cuñados
sacados de un libro de terror.
Escojo conversar
con camareras,
son mejor que un libro,
más vida enseñan,
dan pie con bola,
son más sinceras;
el sí es sí
el no es no.
Foto de EDD Sylvia Nenntwich: https://www.pexels.com/es-es/foto/foto-de-primer-plano-de-la-mariposa-ulises-encaramado-sobre-flor-roja-2664419/
Collige, virgo, rosas,
vuelan las mariposas
entre ababoles rosas
y son así de hermosas.
Extienden candorosas
sus alas entre rosas,
son ellas tan preciosas,
del aire son esposas.
Planean temerosas
y evitan desdeñosas
cardelinas sinuosas
o jilgueras pardosas.
Esquivan cuidadosas
gorrionas laboriosas
y arañas tormentosas
con redes espantosas.
Son ellas tan gloriosas,
se alzan tan primorosas
rozando esplendorosas
lobelias azulosas.
Liban néctar gustosas,
las mieles pegajosas
o esporas esponjosas
gratas y deleitosas.
Dedican a sus cosas
corta edad, son correosas,
aprovechan graciosas
la vida bondadosas.
Imagen de Pexels en Pixabay Me alejé de ti, de nosotros, consumido por las sombras de la noche, de la pálida luna seductora que meciéndo...